Vaya que es muy notorio el desfase entre la tecnología, el pensamiento y la razón, más aún cuando se rompen los límites del respeto y convierten ese gran punto de desarrollo personal, intelectual, y social, en algo parecido al monstruo de las Mil cabezas que a diario amenaza con devorarnos a todos.

Al no saber utilizarla, y sin el cuidado y supervisión de gente profesional para un buen uso y manejo, se convierte una red social en el más grande mercado de las ofensas, diatribas, campos minados de destrucción o regiones pantanosas en donde todos ya se cuidan de caminar so pena de hundirse irremisiblemente en ella.

Gente esclavizada que sin saber expone su privacidad y con ello la seguridad de sus familias, al ignorar que con esa gran tecnología de la Comunicación que debiera de servir para acortar distancias, pero que es utilizada para vigilar, espiar y después destruir a quien se oponga a los benditos mandatos del poder.

¡Esclavos por siempre que entierran a los Hidalgos, Juárez, Morelos, Maderos y ahora el recientemente canonizado portero de la selección nacional de fútbol Ochoa, quienes alguna vez ostentaron el título de libertadores! ¡El Gobierno en contra del pueblo en un equilibrio manipulado de “te mantengo agachado pero te pago por ello para que no levantes la cabeza”.

Programas mañaneros con investigadores gastando a diestra y siniestra el dinero de los mexicanos, que se han convertido en moda y utilizan imitaciones burdas en ese inmenso circo en que han convertido a nuestra patria, donde jaguares, tripas, jabalíes y conejos juegan a ver quien tiene los mejores chismes y con ello se olvidan hasta de cocinar para no recordar que el campo ya no produce, que el mar ya no se explota o que la ganadería se ha olvidado en algún rincón, tan solo para dar de comer al monstruoso morbo que se ha generado en cada ciudadano.

La tecnología en vez de convertirse en un despertar de masas y de conciencias se ha convertido en el arma letal para las masas sin conciencia que desde ahí ametrallan, bombardean y destruyen todo lo que se mueva, en un canibalismo que no se acepta, pero que tampoco se reclama; “si lo hacen los de arriba, quiere decir que está bien hacerlo nosotros también”. ¡Sabias respuestas!, ¡esos son los más grandes ejemplos a seguir!.

Los partidos políticos que son uno en donde están todos, seguirán mandando en una sociedad pasiva avasallada por la tecnología y protegida por el mismo pueblo que en ves de despertar traiciona y se vende en el nombre de una oculta necesidad que ya es tan solo el pretexto para ocultar sus ambiciones personales.