Por El Corresponsal Viajero

Cada día que pasa es más preocupante la inseguridad que se vive en los municipios del Camino Real, en  donde casi a diario  la  ciudadanía  se  queja  por  la  falta  de vigilancia por  parte  de  las corporaciones policiacas y que ha llevado al      aumento  de  hechos  delictivos que van desde el alcoholismo, pandillerismo, el narcomenudeo,  los robos,  hasta las  llamadas  de  extorsión    y   la   aparición   de   narcomantas.

Desde Tenabo  hasta  Calkiní,  pasando  por  los  municipios de  Hecelchakán  y el recién nombrado municipio número 13 de  Dzitbalché,   la  situación  toma  tintes alarmistas,       pues  los  mismos  habitantes  señalan  que  hoy  como nunca, la situación se ha salido de control y ya no se puede presumir, lo que  hasta antes  era  motivo de orgullo al nombrarse a  Campeche como  el Estado más seguro del país.

Del caso tienen muy buenas referencias los habitantes de Tenabo, que casi a diario, por los medios escritos y redes sociales denuncian el notorio aumento de los robos a negocios, casas-habitación y hasta instituciones educativas, las famosas llamadas de extorsión amén del problema del alcoholismo sobre todo en forma clandestina, que las autoridades no solo no combaten, sino que hasta lo alientan.

Otro ejemplo es la llamada Sabana del Descanso, Hecelchakán en donde la policía municipal prácticamente no existe,  pues casi  en sus narices se han estado perpetrando los robos a negocios, en pleno parque principal y hasta la aparición de narcomantas como la más reciente atribuible al Cartel de Sinaloa, que apareció en las paredes de un jardín de niños, sembrando el temor y la zozobra entre los habitantes.

El nuevo municipio de Dzitbalché con sus tres policías y una mujer valiente enfrenta problemas delictivos bastante serios  con el pandillerismo, la indiscriminada venta de alcohol en forma clandestina, los robos a negocios y hasta asaltos que  tienen en la zozobra y la intranquilidad  a los pobladores, ya no solo de la cabecera municipal, sino también de las otras comunidades  de  la  jurisdicción  en  donde  la  ley  no existe.

En Calkiní, la corporación policiaca está a punto de desaparecer, pues entre los elementos que se han jubilado, los que han sido dados de baja y los fallecidos, tan solo se cuenta con una veintena de agentes para atender la cabecera municipal, las juntas de Bécal y Nunkiní y las 12 comunidades de  la   demarcación,   con  arriba  de   50   mil  habitantes,  lo   que   ha hecho del municipio paraíso para la delincuencia.

Hay focos rojos encendidos en todo el Camino Real  por  los  niveles de inseguridad que se viven y que tienen en preocupación a los habitantes, pues ya no es como antaño que solo se hablaba de robos simples, de alcoholismo o  pandillerismo, sino  de la presencia de  cárteles de la droga y  de  los  famosos  colombianos que ya han sido detectados y que se afirma han sentado plaza  en municipios de la región.

   ¿Y las autoridades?...

              DE CHILE, DE DULCE Y DE MANTECA…

QUE la alcaldesa de Tenabo, Karla del Rosario Uc Tuz no es de las que más trabajan, pero sí de las que más cobran, con un jugoso sueldazo de 75 mil pesos mensuales, de acuerdo con el Presupuesto de Egresos de los Gobiernos Municipales. El sueldo de la presidenta de Tenabo, junto con el de la alcaldesa de Calkiní, Juanita del Rosario Cortes Moo, que gana alrededor de 77 mil pesos, es de los más altos en los municipios del Camino Real, pues en el caso de Hecelchakán, José Dolores Brito Pech, tendría un sueldo de alrededor de 60 mil pesos y el alcalde de Dzitbalché, Roberto Herrera Mas estaría cobrando 52 mil pesos mensuales. La administración que encabeza la prianista Karla Uc Tuz ha sido una de las más criticadas por el abandono en que se encuentra el municipio, debido a la falta de obra pública, principalmente en lo que se refiere a calles que están en muy pésimo estado, así como  el alumbrado, el agua potable y la seguridad pública, que a diario son motivo de protesta ciudadana. Dicen los tenabeños que  si  la  alcaldesa ganara por el trabajo que hace a favor de las familias que aquí viven se estaría muriendo de hambre, pues  no  desquita  el  ostentoso  salario que se embolsa y eso  es un verdadero robo al erario público. ¡Ver para creer!...  

QUE la líder del Sindicato de Trabajadores de los Tres Poderes en el Ayuntamiento de Dzitbalché, Roxana Santini Centeno actúa muy sospechosamente y hasta se presume es cómplice de las tropelías del alcalde morenista, Roberto Herrera Mas, al desajenarse de la defensa de los derechos sindicales de sus agremiados y permitir que la autoridad  vulnere los logros de la agrupación en beneficio de los trabajadores activos y jubilados. Una de las últimas fechorías del alcalde “Robertítere”  fue quitar la pensión a cinco ex trabajadores jubilados de la Comuna, personas de la tercera edad,  a quienes sin miramientos y sin explicación alguna les suspendió desde enero el pago de este apoyo que necesitan para tratamientos médicos y medicamentos. Ante esta acción  que consideran una verdadera injusticia, los afectados recurrieron a su “líder”  sindical, Roxana Santini Centeno,  que al igual que en otras ocasiones se hizo de la vista gorda, denotando  el contubernio y complicidad que existe con el edil Herrera Mas y que en mucho lesiona a los trabajadores del Sindicato de los Tres Poderes en Dzitbalché. Los agremiados ya  le  están  juntando el lavado y el planchado a la tal  Santini  Centeno  y muy  pronto   le   ajustarán  las  cuentas…

UNA serie de inconformidades se han estado registrando por parte de los becarios  del programa “Jóvenes Construyendo el futuro”, que se maneja con recursos del gobierno federal y en donde se presumen actos de corrupción,  que involucran directamente  a los llamados patrones  que a cambio de  mantenerlos en la lista de beneficiarios  les exigen mochada y realizar otras actividades ajenas a las funciones para las cuales fueron contratados. Los casos se han estado denunciando públicamente a través de los medios escritos y las redes sociales  en donde se señala que estos  jóvenes deben recibir mensualmente   3 mil 600 pesos  como parte del trabajo y  capacitación que  realizan  en distintos negocios y servicios, sin embargo los patrones los ponen a realizar otras actividades ajenas para la que fueron contratados  tratándolos como la servidumbre  o en su caso les exigen mochadas que van de los 500 hasta los  mil 500 pesos  a cambio de mantenerlos como aviadores en la lista de beneficiarios del programa. Caso reciente fue el que denunciaron la semana pasada jóvenes de Becal y que involucra a Fátima Dzib Cahuich, hermana de Jonathan Dzib Cahuich, funcionario de la Cuarta Transformación, subsecretario de Atención para el Desarrollo de la Población Indígena  de la Sedesyh, que con su negocio de comida reclutaba a jóvenes a los que explotaba, mochándoles dinero de la beca que recibían a través del programa y los hacía trabajar hasta horas extras. El asunto debe ser investigado.

HASTA LA PROXIMA…

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